Unos días después de la entrada de las tropas franquistas en La Coronada el 25-07-1938, el nuevo mando militar llamó a declarar a los republicanos que habían regido los destinos del pueblo durante los dos primeros años de guerra.
Al terminar su declaración Antonio Grande Arias, alcalde socialista durante los siete primeros meses de la contienda, le dijo con toda firmeza a su entrevistador: «Si me va a matar Vd., mejor mañana que pasado, pero antes de llevarme a la tapia se pase Vd. por Don Benito y Villanueva y pregunte a esos catedráticos [se refería a conocidos profesores refugiados en La Coronada durante el periodo republicano] y, según le digan ellos, pues… me hace Vd. lo que sea».
Informado que ya estaba el militar franquista, le dejó en libertad sin cargos, dándole un abrazo, según familiares del alcalde.
Qué sé yo, que Antonio Grande no pase a la historia de La Coronada como uno de los grandes, grandes.
*Foto inicial: Firma de Grande Arias (Archivo Gral. de la Guerra Civil. Salamanca).