Inmersos como estamos en una pandemia de alcance mundial, resulta cuando menos curioso que un gran porcentaje de la población afirme que no se fiará de la futura y esperada vacuna cuando esta esté disponible. Incluso llegan a decir que, llegado el caso, no se vacunarán.
Pues bien, con ánimo de reivindicar el bien que han hecho las vacunas en nuestro mundo, y más concretamente en nuestro pueblo, me hago eco de una noticia de 1904 publicada en el periódico «El Norte de Extremadura», en la que se mencionaba a nuestros antepasados coroneles como una referencia a imitar ante la, también temida, epidemia de viruela.
«En La Coronada, pueblo de 2500 habitantes perteneciente a la provincia de Badajoz, no se ha registrado un solo caso de viruelas en dieciocho años, habiendo sufrido la epidemia varias veces, pueblos muy cercanos a aquella villa.
La causa se debe al ilustrado médico de La Coronada, D. Lorenzo de la Cruz Pérez, que constantemente se dedica por todos los medios a la vacunación y revacunación de todos los vecinos. Allí se revacunan personas que cuentan más de sesenta años de edad».
La noticia publicada en el periódico en cuestión, hace referencia a un artículo previo publicado en la revista de medicina de Barcelona, «La higiene para todos». No he podido tener acceso al artículo original de la revista, por lo que sólo incluyo la imagen de la nota publicada en «El Norte de Extremadura».
[Retrato de Don Lorenzo de la Cruz Pérez. Imagen cedida por Juanjo Arias, a quien le fue cedida a su vez por la nieta del mencionado médico.]
Afortunadamente, en nuestro pueblo no ha habido demasiados contagios por COVID hasta la fecha. Y creo que es deseo de todos que esto siga siendo así y, por supuesto, que los casos que actualmente hay activos se recuperen lo antes posible.
Cuidaros mucho y, cuando haya vacuna, a dar ejemplo como nuestros antepasados.
[La noticia a la que hago alusión comienza al final de la tercera columna del periódico. Abajo del todo.]